Pero tenemos salud '08

Como es siempre lo mismo, hoy 22 de diciembre, re-publico el post que ya escribí en 2005 por estas fechas sorbe el sorteo de Loteria de Navidad. No está tan desactualziado, aunque claro, el espíritu de cirsis en todo lo que nos rodea no existía por entocnes; todo lo contrario, las casas eran cara, los albañiles abundaban y cualquier cantidad que te tocaba pensabas en invertirla, algo que hoy día dicen algunos que no es recomendable. Aunque quién sabe hoy día de qué expertos hay que fiarse, si de los que dijeron que no había crisis, de los que decían que la crisis sería tangencial en España o de los que pronosticaban una dsaceleración y aterrizaje suave. Es difícil fiarse ahora de un economista...

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Confirmado. La Lotería de Navidad siempre toca a los mismos: a los demás. Y también confirmado que España es un país de albañiles frustrados. En cuanto tenemos un poco de dinero extra nos gusta “tapar agujeros”. Todo el mundo pendiente de la televisión, de que uno de nuestros números vaya acompañado de un porrón de ceros. Y si no, esperando disimuladamente a que suene el teléfono y alguien nos diga “que nos ha tocao el gordo” o cualquier otro premio.

La verdad es que si no te tocan muchos millones, tirando para 150 o 200 millones de pesetas para uno o la familia más cercana, no lucen los premios. Es casi un problema. Hay gente que le ha tocado ocho millones, que es para un coche y poner el cuarto de baño guapo. Otros tienen 30 millones, que está mejor. Pero da para una casa y según el sitio, un pisito al fin y al cabo. Con 50 millones de pesetas una casa algo mejor, o terminar de pagar el piso, comprarte un coche y pegarse un viajecito. Al final lo gastan todo, tienen algo más, pero ni han ahorrado nada, deben seguir trabajando y en poco tiempo se vuelve a tener los problemas para llegar a fin de mes. Vuelta a lo de siempre, al albañil frustrado.

Achís!
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Este año la foto en vez de Luxemburgo, podría ser de Bern Schuster, que no ha llegado a "comerse el turrón" en el Real Madrid.